Hoy les presentamos a Andrea Rosales, participante del Ciclo de formación sobre Laicidad y Derechos Reproductivos, impulsado por Somos Muchas y el Fondo Centroamericano de Mujeres (FCAM) como trabajo final, Andrea realizó un ensayo sobre lo aprendido a lo largo del Ciclo.
CONSTRUIR JUNTAS DESDE LA DIVERSIDAD DE CREENCIAS
El Ciclo de formación sobre Laicidad y Derechos Reproductivos, promovido por Somos Muchas, presentó una oportunidad para que feministas hondureñas ampliaran sus conocimientos mediante una serie de módulos y jornadas, las cuales iban orientadas a fomentar su reflexión crítica y el diálogo propositivo sobre la relación entre ambos temas. De tal forma, las participantes pudieron conocer a detalle desde lo más básico como saber las bases del laicismo en Honduras y América Latina y el Caribe hasta comprender a profundidad cómo es que funciona y se financia el entramado neoconservador en distintas partes del mundo.
En mi caso particular, el Ciclo significó replantearme muchos de mis discursos una vez que llegamos al Módulo 2, el cual consistió en los debates sobre el Estado laico y el papel de las iglesias en la sociedad como constructor de las conciencias individuales y colectivas.
Durante años había sido del tipo de persona que resentía mucho el rol de la Iglesia en nuestra sociedad, y cómo esta suele influenciar a los tomadores de decisiones hacia políticas o discursos que violentan los derechos de las mujeres y las personas gestantes, lo cual me afectaba directamente y me hacía tener una opinión muy negativa sobre todo el asunto. Sin embargo, el hacer las lecturas previas, asistir a las dos sesiones de este módulo y escuchar a las compañeras que sí profesan una religión me hizo cambiar de opinión por completo.
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